La delegada de Educación tranquiliza a los padres «como docente y como madre» (ABC, 24-9)

Manifestación de los padres de los Altos Colegios, ayer en la Macarena. ROCÍO RUZ

ÁNGEL PÉREZ GUERRA/SEVILLA. «No hace tanto tiempo que estudiar era un lujo.» En la extensión cuantitativa de la Educación centró ayer su discurso -netamente político- la delegada de la Consejería en Sevilla, Elena Nimo, que acudió a un desayuno con los periodistas convocado por la Asociación de la Prensa y Café de Indias para hacer frente a la avalancha de críticas que está recibiendo el comienzo de curso en la provincia, reproches injustificados a la vista de los «datos objetivos de la Inspección», que sitúan las incidencias por debajo de las de hace un año.

Es esta antropóloga de 51 años, ex alcaldesa de Brenes y ex presidenta del PSOE de Sevilla, una mujer de sentencias contundentes y convicciones vehementes. «Soy docente y soy madre. Sé de lo que estoy hablando», proclamó ayer tras asegurar, a propósito de la escolarización de niños de 3 años en Sevilla Este: «El trauma no es para que dure toda la vida». Acababa de comprometer su palabra en que a mediados de octubre, como muy tarde, estarán todos en clase.

Crecimiento de un 30 %

Antes de ser interrogada sobre la imprevisión de la Administración educativa, la delegada salió al paso indicando que en los últimos cuatro años la población infantil de Sevilla ha crecido un 30% y por dos veces se quejó de la velocidad a la que actualmente se construye: «Es que hoy un promotor te hace mil viviendas en quince meses».

Aunque «venda» la oferta tecnológica oficial, no parece seducirle excesivamente los ordenadores: «En educación, los recursos básicos son los maestros y la palabra». Claro que le faltó tiempo para aplicar los principios del materialismo dialéctico a las aulas: «Debemos procurar que la lucha entre los ciberricos y los ciberpobres no nos coja, que ya hemos perdido algún tren. Aquí el cartero no llama dos veces.»

Se apresuró también Elena Nimo a dejar claro que la Consejería apuesta por la enseñanza pública. «Existen otras maneras de enseñanza -señaló-, como la concertada, pero son maneras de complementar a la pública.» Y no se mordió la lengua cuando aseveró: «Os puedo asegurar que la concertada también tiene sus problemas. Pero el argumento es muy fácil. Le dicen al padre «si no le gusta llévese a su niño».»

Las «potentísimas inversiones» desplegadas año tras años por la Consejería fueron desgranadas por la delegada como argumento para probar que no hay lugar para la improvisación. Fue firme en la aclaración de que las llamadas «caracolas» reúnen todas las condiciones de habitabilidad exigibles a una construcción de albañilería, y para consolidar sus palabras puntualizó que el centro Los Azahares está ejecutado con esta técnica. «No hemos recibido ninguna queja de padres que tengan a sus hijos en este tipo de aula», apostilló. Con los planos en la mano -e incluso alguna fotografía en la que se veía unas piezas de cuarto de baño a la medida de los pequeños-, Elena Nimo desmenuzó datos, proyectos y fechas futuros, incluido el incremento de 72.000 nuevos habitantes en Sevilla Este, donde quiere implantar, una vez que se ha cubierto la digitalización, el plan de apertura para que padres y madres puedan trabajar holgadamente. Y para rematar, se mostró «contenta porque se están cumpliendo los plazos de las obras».

Plena sintonía con el Ayuntamiento

Negó que haya tensiones con el Ayuntamiento de Sevilla. «En este momento la coordinación con el Ayuntamiento es magnífica. Me siento muy reconfortada con que en el Ayuntamiento estén dos personas muy vinculadas con la Educación, y una de ellas en Patrimonio y Hacienda, nada menos», dijo en referencia a Aurora Atoche y a Inmaculada Muñoz, que fuera la delegada que le «pasó los trastos». «La sintonía con el Ayuntamiento es total. El alcalde me dijo: «Delegada, lo que haga falta.»»

Tras el Aljarafe y Sevilla Este, la Ruta de la Platay la Vega

«El Aljarafe y Sevilla Este forman parte de mis prioridades. Después viene la Ruta de la Plata y la Vega.» Éste es el programa de actuaciones de la Delegación, que ha encontrado serios problemas con la propiedad del solar donde iba a edificarse el nuevo centro de Tomares, donde Elena Nimo espera que empiecen las obras en el segundo trimestre del curso.

Con los Altos Colegios de la Macarena el escollo ha sido, según explicó la delegada, que ninguna empresa quiso licitar en las dos primeras convocatorias y hubo que ofrecer una tercera con un 20% de incremento. Fueron los pintores quienes descubrieron las grietas, ya a finales de agosto, con lo que, «aunque los técnicos garantizaban que no había peligro», Elena Nimo ha tenido que arbitrar medios (tras la entrevista de los padres con la consejera) no aceptados por los padres, como el traslado al colegio Padre Manjón. Ayer, volvieron a manifestarse ante el Parlamento. Pero la delegada ha intentado tranquilizarles: «Nos hemos comprometido a enviarles un cronograma de las actuaciones».

El inicio de curso lleva siempre aparejadas otras disfunciones. Lamentó ayer la delegada el medio millar de bajas que en la provincia se producen durante las primeras jornadas escolares, aunque se disculpó basándose en que «en Educación un trabajador hasta el tercer día de enfermedad no tiene por qué presentar baja.»