Didácticas

Otra historia para meditar y para comentar:

El seminario del CAP de este sábado fue genial. Empezó, nos contaron cosas de los niños y la física y la química y, llegado un momento, la que nos daba la charla (que ya se nos había presentado como autora de uno de los libros) va y nos dice: "Mirad a este problema".

Era el típico problema de química: "Qué candidad de ácido mierdhídrico (no recuerdo cuál era) necesitamos para preparar 300 ml. de una disolución 0.5 M.?" Algo así decía. Y nos dice, "qué os parece?", y lo normal es pensar "Bien, un problema para aprender a calcular cosas de esas". Pero claro, ya nos parecía (por lo leído en los libros de la "teoría de la didáctica y el aprendizaje") que eso, nos parecía que era un enunciado terrible, porque los enfoques actuales dicen que a nadie le importa saber calcular estas cosas, que hay que hacerlo todo mucho más sencillo para que estén todos los niños más contentos.

Así, pues, nos dice: "¿Qué os parece? ¡¡¡Este problema, es terrible!!! ¡¡¡Es CERRADO!!!", y todos, "¡ostras!, es cerrado!", y dice, "¡claro!, ¡¡¡sólo tiene una solución posible!!!" Y tu, "pos claro, no va a tener dos"; y claro, dice ella, "¡¡y eso es terrible!!, porque solo tiene una solución, es un enunciado cerrado, eso es lo peor, ¡¡un niño con esto se le cae el mundo encima!!, ¿quién sabría como convertir ese enunciado en un problema abierto, para que todo sea más didáctico según las teorías actuales, y los niños estén más contentos?"

Todos nos miramos, y ni flowers de hacer con eso un enunciado más abierto. Un problema de este tipo siempre tendría una solución, nunca dos. Pues no, salió uno que me parece recordar que era ingeniero (y no lo digo por nada, es un comentario únicamente y totalmente descriptivo) y dice, "yo!, yo sé como convertir este problema en un problema abierto". Y nos dice:

"Yo lo expondría así: En casa tenemos muchos productos que son ácidos, como por ejemplo desinfectantes, productos de limpieza... Busca información sobre ellos, y ordénalos de más a menos fuerte".

DIOS. Me quedé helado. Este tipo de cosas son las que venían en los libros, pero yo habría sido incapaz de transformar un problema en el otro; de hecho, para mí son dos problemas totalmente distintos. Pero no!, este tío había captado toda la esencia de la didáctica CAPeriana, sabía como hacerlo, sabía como hacer problemas abiertos que dejaran en nada los cáculos numéricos, antiguos y discriminativos, y sabía como centrarse en la enseñanza cualitativa!. Yo lo flipé.

Eso sí, había un "pero": dice la tía, "bueno, pero... les das demasiada información, les hablas de desinfectantes, se podrían preguntar, qué es eso? Es información innecesaria". Oh, perdón, pensé yo; ya veo que es muy delicado, el trauma que puede suponer la palabra "desinfectante".

Y nada, que ésta es la esencia del tema, problemas abiertos; ya digo, lo que más me sorprendió fue que alguien dominara tanto la "apertura" de los problemas, fue increíble.

Luego, la mujer nos contó que "estamos delante de una de las cosas más importantes, la resolución de problemas"; y digo yo, claro, es vital, están la Física, las Matemáticas, la Filosofía, la Literatura y la Resolución de Problemas. Cómo se me había pasado por alto!!

Después, otro comentario: "Yo investigo en resolución de problemas; yo, DIRIJO TESIS en resolución de problemas". Y eso, yo no lo vi muy claro; eso se puede hacer? Quiero decir, para mi, investigar es algo científico, mínimamente cuantitativo, serio... Y bueno, no sé como se investigará en esos temas; yo lo que haría sería ir a institutos, ver niños, hacer estudios estadísticos... aunque supongo que, siguiendo sus teorías didácticas, los pasos a seguir en la investigación serán algo así como:
1) Ir a una clase;
2) preguntar a los alumnos que opinan de los problemas que les ponen en clase;
3) ver a cuáles les gustan y a cuáles no;
4) ordenar sus nombres alfabéticamente.